Como los álamos que crecen altos soportando el viento,
como los diamantes escondidos en el barro,
como el salmón que nada contra la corriente,
en la vida más triste, si buscamos enbcontramos belleza.
Gracias Cecilia Gozzi, por esta hermosa foto.
25/9/07
Cuando vivía en España me encantaba leer a Elvira Lindo y "Su tinto de Verano",
Era un libro que sacaba hacia junio, julio, cuando empezaba a sudar , y Madriz quedaba vacía.
Todos los años un tinto que se leía fácil, como se bebe un tinto azucarado y con hielo.
En él, ellos, contaba , casi, su vida. Y en ese casi, residía la genialidad de Elvira Lindo. Nadie sabía qué era verdad y qué era inventado, si el marido era cornudo , si ella estaba cachonda con el fontanero o si sus hijos se drogaban.
Por eso, cuando lean mi blog, piensen en que ella es mi mayor inspiración, y no se atosiguen con las mentiras que siempre terminan siendo verdaderas, ni se crean las verdades, que ellas cambian de dirección, como las ideas de la cabeza de Man Ray.
2/10/07
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